Así fue como descubrí mi Guerrero Interior

¿Sabías que la mayoría de las personas no se sienten realizadas en su trabajo? A pesar de tener éxito en términos convencionales, siguen buscando algo más. ¿Por qué?

Descubre el secreto del éxito verdadero que te hará sentir realizado, feliz y con un propósito en la vida.

En mi camino, he conversado con miles de personas y he descubierto una verdad innegable: la sociedad nos dice que el éxito se mide en cinco cosas: un buen puesto, poder, reconocimiento, dinero y placer. La gente casi siempre menciona estas cinco áreas, pero ¿será que somos realmente exitosos al tener las cinco áreas desarrolladas completamente en nuestras vidas?

Mi nombre es Nancy Guerrero y durante muchos años me enfoqué en lo que «debía» estudiar para asegurar un futuro estable, sin considerar si realmente me llenaba. En mi caso, la contaduría parecía la opción lógica, pero al iniciar mi vida laboral, descubrí que era incompatible con mi personalidad extrovertida y sociable. Me desesperaba la rutina y la falta de variedad en el ciclo contable, y supe que ese no era mi camino.

Fue entonces cuando mi esposo Ismael, un apasionado por la tecnología y la educación, me inspiró a buscar mi propio «para qué» en la vida. Juntos decidimos crear una empresa donde yo me involucré en el área comercial. Allí florecieron mis habilidades de comunicación y liderazgo. Construimos un gran equipo y crecimos como familia y empresa.

Sin embargo, a pesar del “éxito”, algo faltaba. Pasados un par de años, empecé a sentir que mi trabajo ya no me satisfacía. Me preguntaba si la vida solo se trataba de trabajar, conseguir dinero y ya. Esa incertidumbre me generaba una profunda insatisfacción.

Así que, por medio de una amiga me inscribí en un proceso de coaching personal y en medio de este proceso estudié cuál era el factor común que hacía a las personas, exitosas, felices y con ímpetu frente a la vida. Analizamos la historia de líderes como Abraham Lincoln, Martin Luther King Jr, Mandela, John Maxwell y otros.

Descubrí dos cosas claves que condujeron a estos líderes al éxito verdadero:

  1. Tenían un propósito de vida por el cual vivir e incluso morir, un propósito de vida más grande que ellos, un propósito que les permitió dejar un legado realmente trascendente.
  2. Que estas personas basaron su proceso de toma de decisiones en principios, lo que les permitió tomar decisiones sabias y los llevó a forjar grandes relaciones y a ejercer un liderazgo integral.

Hoy estoy convencida que el éxito es una jornada, una realización progresiva de todo lo que yo puedo ser y hacer. Eso significa crecer progresiva y congruentemente en mi carácter y en mi conducta. De hecho, el éxito se asegura en los pequeños momentos del día. Son los pequeños pensamientos, los pequeños hábitos que aseguran nuestro éxito. El éxito no es un solo resultado final, sino el proceso que va más allá de la mera obtención de logros externos.

Hoy vivo una vida con balance entre mi familia, mi trabajo y lo que me apasiona, disfrutando de una vida financieramente libre, con significado y satisfacción personal al descubrir y vivir de mi propósito de vida.

Te invito a romper las cadenas de esta definición limitada y a descubrir tu camino hacia el éxito verdadero, uno que abarque todas las áreas de tu vida y te lleve a alcanzar plenitud y bienestar integral.

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